El Ayuntamiento de Medina Sidonia inició el 23 de enero de 2017 los trabajos de localización del cuerpo del ubriqueño Juan Ruiz Huércano «El Capitán», guerrillero antifranquista muerto por disparos de la Guardia Civil en el año 1949. Esta actuación también pretende localizar los restos de Bernabé López Calle «Comandante Abril», guerrillero antifranquista de Montejaque (Málaga). Ambos fueron enterrados en una fosa común del cementerio municipal.de Medina Sidonia. El alcalde de esta localidad, Manuel Fernando Macías, destacó «la importancia de este hecho, puesto que se trataría, en el caso de que la localización fuera fructífera, de devolver parte de la historia olvidada del municipio», según expresó en la web municipal. Estos trabajos están dirigidos por el arqueólogo Jesús Román Román.
El Ayuntamiento de Medina Sidonia informó: «Ambos guerrilleros fueron abatidos a finales del año 1949 y por tanto la dignificación de su memoria supone dar un paso hacia delante contra el silencio establecido desde aquella fecha.
Hay que recordar que en el 2002 Manuel Fernando Macías junto con Luís García Bravo (Foro por la Memoria) y junto a representantes de UGT, PCE e Izquierda Unida celebraron un homenaje a estas dos figuras de la resistencia antifranquista española.
Para el alcalde, es por tanto más que significativo esa actuación contra el olvido en Medina Sidonia; además ha agradecido la predisposición de los familiares, algunos residentes en Francia (familia de Bernabé López Calle), y la permisividad de los mismos de cara a la realización de esta excavación».
Comunicado del PCE
Por su parte, la Secretaría de Movimiento Republicano y Memoria Democrática del Partido Comunista de España felicitó la actuación del equipo de gobierno de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Medina Sidonia, y en un comunicado, difundido en Mundo Obrero, expresó: «Desde la Secretaría de Movimiento Republicano y Memoria Democrática del Partido Comunista de España, felicitamos la actuación del equipo de Gobierno de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Medina Sidonia (Cádiz) que en la mañana de hoy ha comenzado los trabajos de localización de la fosa común del cementerio de Medina Sidonia. Dichos trabajos durarán aproximadamente diez días, para proceder a su posterior excavación y recuperación de los restos mortales depositados en ella, donde podrían estar enterrados los guerrilleros antifranquistas Bernabé López Calle ‘Comandante Abril’ y Juan Ruiz Huércano ‘El Capitán’, ambos asesinados en 1949.
Con estos trabajos no solo se va a iniciar la recuperación de estos «nombres olvidados», sino también «la memoria» de estas y otras personas cuyos nombres no figuran prácticamente en ningún sitio, muchos de ellos ni siquiera en registro alguno.
Se trata de una cuestión de dignidad y desde el PCE revindicamos el trabajo que en este sentido se está realizando desde el Ayuntamiento de Medina Sidonia, ya que este proyecto permitirá dar luz a una parte de nuestra historia, dignificando y recuperando la memoria de las personas que dieron su vida por la democracia en nuestro país».
EL COMANDANTE ABRIL
«Bernabé López Calle, apodado como ‘Comandante Abril’, era natural y vecino de Montejaque. Contaba 26 años cuando, ya casado, ingresó en la Guardia Civil, donde prestó sucesivos servicios en la Comandancia de Caballería del 21º Tercio de Barcelona y del 4º Tercio de Sevilla. En marzo de 1931 es destinado a Málaga, donde al mes siguiente es proclamada la Segunda República. Posteriormente es destinado a Antequera donde, como Jefe de Puesto, le sorprende el golpe de estado el 18 de julio de 1936. Será en esa fecha cuando decide afiliarse a la CNT. La historia de Bernabé López Calle y la de su hermano Pedro López Calle estuvieron siempre muy ligadas. El día 19 de julio Pedro López Calle organizó una columna de milicianos que contribuyó a la liberación de algunos pueblos de la Serranía de Ronda y al mismo tiempo resistió ataques del ejército rebelde en pueblos de la provincia de Cádiz. La columna pasó después a llamarse ‘batallón Pedro López’ o ‘la columna de Pedro López’ por voluntad de todos los que la integraban. Bernabé moría en un enfrentamiento con la Guardia Civil el 31 de diciembre de 1949 en la Garganta del Jurado, del término municipal de Medina Sidonia (Cádiz), siendo enterrado en el cementerio de dicha ciudad. Ese 31 de diciembre de 1949, fuerzas de la Guardia Civil de los puestos de Cádiz Medina Sidonia y San Fernando, al mando del teniente José Guirado García, sostuvieron un encuentro armado con una partida de guerrilleros en el lugar conocido como Garganta de la Dehesa del Jurado, dentro del término municipal de Medina Sidonia (Cádiz). En este encuentro armado resultaron muertos los guerrilleros Juan Ruiz Huércano ‘Capitán’ y Bernabé López Calle ‘Comandante Abril’. De este encuentro armado pudieron huir otros guerrilleros como el hijo de Bernabé, Miguel López García ‘Darío’ y Alfonso Sánchez Gómez (Potaje)».
EL CAPITÁN
«El otro fallecido, Juan Ruiz Huércano ‘El Capitán’, había nacido en Jimena de la Frontera en 1911, de profesión arriero y carbonero. Estaba afiliado al Partido Comunista y estaba considerado como un hombre de acción. Cuando comenzó la Guerra Civil marchó a zona republicana, encuadrándose en el ejército donde llego al cargo de Capitán. Al término de la guerra fue detenido y más tarde puesto en libertad vigilada. En abril de 1947 huyó a la sierra aunque ya había estado ejerciendo como enlace de los guerrilleros con anterioridad. Es considerado también organizador de la Alianza de Fuerzas Democráticas. Cuando se incorporó a la guerrilla lo hizo junto a Bernabé, quien en esa fecha hacía tres años que estaba luchando en la sierra».
Comunicado del grupo de trabajo RMHSA-CGT.A
«En la mañana del lunes 23 de enero han comenzado en el cementerio de Medina Sidonia los trabajos de localización de los restos de los guerrilleros Bernabé López Calle y Juan Ruiz Huércano, acribillados a tiros por la Guardia Civil el último día de 1949 y enterrados en el camposanto asidonense de forma anónima un día después.
Los ha iniciado el Ayuntamiento de Medina tras la solicitud presentada por este grupo hace dos años y, todavía, no contestada a pesar de lo que su alcalde declaró recientemente a la prensa. Hace dos semanas convocamos una concentración en el mismo cementerio con la finalidad de recordar nuestra petición y las anteriores promesas que el equipo de gobierno municipal había hecho en el sentido de que sería el propio ayuntamiento quien la realizaría.
Nos alegramos, por partida triple, del comienzo de los trabajos y nos alegraríamos mucho más de que concluyeran con éxito y que, en un plazo más breve que largo, la sepultura estuviera señalizada convenientemente terminando, 67 años después, con el anonimato al que la dictadura franquista los quiso condenar aún después de muertos. Por fin sus familias podrán saber dónde reposan con exactitud los huesos de sus deudos.
En primer lugar porque, por fin, ha comenzado. Sinceramente teníamos nuestras dudas por los antecedentes de estos dos últimos años. Dudas que quedan despejadas. Nunca hemos querido ningún tipo de protagonismo y por eso nos satisface que, por sea quien sea, se lleven a cabo los trabajos. Estaremos allí apoyándolo y colaborando en lo que podamos y se nos pida. Siempre hemos actuado así, sin ningún tipo de sectarismo ni ninguneo. Seguimos pensando que la acción colectiva es cosa de todos y que instituciones y sociedad civil pueden ir juntas. Eso sí, siempre que se basen en la verdad, se huya del sectarismo y se sea franco.
En segundo lugar porque los trabajos los lleva a cabo el equipo técnico propuesto en su momento en la memoria de trabajo que acompañó a la solicitud presentada y, hasta el momento, no respondida. Un equipo de la máxima garantía profesional y compromiso memorialista. Nunca está de más recordar que las exhumaciones de asesinados por el franquismo no son un mero trabajo arqueológico, sino que tiene un fuerte componente de compromiso social y personal.
En tercer lugar, por fin, por un motivo que tiene un punto de egoísta. También por tercera vez antes ocurrió en Zalamea (Huelva) y Paterna (Cádiz) el dinero que este grupo tiene presupuestado para una intervención de estas características no ha sido invertido. Ya una vez comentamos el poder de atracción que tiene, ya que con esta van tres, el anuncio y petición de utilizarlo ha sido el desencadenante de que las más diversas instituciones nos liberaran del compromiso. Que habrá una cuarta es seguro. Pondremos todo nuestro empeño.
¡Viva Bernabé López Calle!
¡Viva Juan Ruiz Huércano!».
El Ayuntamiento de Medina Sidonia informó: «Ambos guerrilleros fueron abatidos a finales del año 1949 y por tanto la dignificación de su memoria supone dar un paso hacia delante contra el silencio establecido desde aquella fecha.
Hay que recordar que en el 2002 Manuel Fernando Macías junto con Luís García Bravo (Foro por la Memoria) y junto a representantes de UGT, PCE e Izquierda Unida celebraron un homenaje a estas dos figuras de la resistencia antifranquista española.
Para el alcalde, es por tanto más que significativo esa actuación contra el olvido en Medina Sidonia; además ha agradecido la predisposición de los familiares, algunos residentes en Francia (familia de Bernabé López Calle), y la permisividad de los mismos de cara a la realización de esta excavación».
Comunicado del PCE
Por su parte, la Secretaría de Movimiento Republicano y Memoria Democrática del Partido Comunista de España felicitó la actuación del equipo de gobierno de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Medina Sidonia, y en un comunicado, difundido en Mundo Obrero, expresó: «Desde la Secretaría de Movimiento Republicano y Memoria Democrática del Partido Comunista de España, felicitamos la actuación del equipo de Gobierno de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Medina Sidonia (Cádiz) que en la mañana de hoy ha comenzado los trabajos de localización de la fosa común del cementerio de Medina Sidonia. Dichos trabajos durarán aproximadamente diez días, para proceder a su posterior excavación y recuperación de los restos mortales depositados en ella, donde podrían estar enterrados los guerrilleros antifranquistas Bernabé López Calle ‘Comandante Abril’ y Juan Ruiz Huércano ‘El Capitán’, ambos asesinados en 1949.
Con estos trabajos no solo se va a iniciar la recuperación de estos «nombres olvidados», sino también «la memoria» de estas y otras personas cuyos nombres no figuran prácticamente en ningún sitio, muchos de ellos ni siquiera en registro alguno.
Se trata de una cuestión de dignidad y desde el PCE revindicamos el trabajo que en este sentido se está realizando desde el Ayuntamiento de Medina Sidonia, ya que este proyecto permitirá dar luz a una parte de nuestra historia, dignificando y recuperando la memoria de las personas que dieron su vida por la democracia en nuestro país».
EL COMANDANTE ABRIL
«Bernabé López Calle, apodado como ‘Comandante Abril’, era natural y vecino de Montejaque. Contaba 26 años cuando, ya casado, ingresó en la Guardia Civil, donde prestó sucesivos servicios en la Comandancia de Caballería del 21º Tercio de Barcelona y del 4º Tercio de Sevilla. En marzo de 1931 es destinado a Málaga, donde al mes siguiente es proclamada la Segunda República. Posteriormente es destinado a Antequera donde, como Jefe de Puesto, le sorprende el golpe de estado el 18 de julio de 1936. Será en esa fecha cuando decide afiliarse a la CNT. La historia de Bernabé López Calle y la de su hermano Pedro López Calle estuvieron siempre muy ligadas. El día 19 de julio Pedro López Calle organizó una columna de milicianos que contribuyó a la liberación de algunos pueblos de la Serranía de Ronda y al mismo tiempo resistió ataques del ejército rebelde en pueblos de la provincia de Cádiz. La columna pasó después a llamarse ‘batallón Pedro López’ o ‘la columna de Pedro López’ por voluntad de todos los que la integraban. Bernabé moría en un enfrentamiento con la Guardia Civil el 31 de diciembre de 1949 en la Garganta del Jurado, del término municipal de Medina Sidonia (Cádiz), siendo enterrado en el cementerio de dicha ciudad. Ese 31 de diciembre de 1949, fuerzas de la Guardia Civil de los puestos de Cádiz Medina Sidonia y San Fernando, al mando del teniente José Guirado García, sostuvieron un encuentro armado con una partida de guerrilleros en el lugar conocido como Garganta de la Dehesa del Jurado, dentro del término municipal de Medina Sidonia (Cádiz). En este encuentro armado resultaron muertos los guerrilleros Juan Ruiz Huércano ‘Capitán’ y Bernabé López Calle ‘Comandante Abril’. De este encuentro armado pudieron huir otros guerrilleros como el hijo de Bernabé, Miguel López García ‘Darío’ y Alfonso Sánchez Gómez (Potaje)».
EL CAPITÁN
«El otro fallecido, Juan Ruiz Huércano ‘El Capitán’, había nacido en Jimena de la Frontera en 1911, de profesión arriero y carbonero. Estaba afiliado al Partido Comunista y estaba considerado como un hombre de acción. Cuando comenzó la Guerra Civil marchó a zona republicana, encuadrándose en el ejército donde llego al cargo de Capitán. Al término de la guerra fue detenido y más tarde puesto en libertad vigilada. En abril de 1947 huyó a la sierra aunque ya había estado ejerciendo como enlace de los guerrilleros con anterioridad. Es considerado también organizador de la Alianza de Fuerzas Democráticas. Cuando se incorporó a la guerrilla lo hizo junto a Bernabé, quien en esa fecha hacía tres años que estaba luchando en la sierra».
Comunicado del grupo de trabajo RMHSA-CGT.A
«En la mañana del lunes 23 de enero han comenzado en el cementerio de Medina Sidonia los trabajos de localización de los restos de los guerrilleros Bernabé López Calle y Juan Ruiz Huércano, acribillados a tiros por la Guardia Civil el último día de 1949 y enterrados en el camposanto asidonense de forma anónima un día después.
Los ha iniciado el Ayuntamiento de Medina tras la solicitud presentada por este grupo hace dos años y, todavía, no contestada a pesar de lo que su alcalde declaró recientemente a la prensa. Hace dos semanas convocamos una concentración en el mismo cementerio con la finalidad de recordar nuestra petición y las anteriores promesas que el equipo de gobierno municipal había hecho en el sentido de que sería el propio ayuntamiento quien la realizaría.
Nos alegramos, por partida triple, del comienzo de los trabajos y nos alegraríamos mucho más de que concluyeran con éxito y que, en un plazo más breve que largo, la sepultura estuviera señalizada convenientemente terminando, 67 años después, con el anonimato al que la dictadura franquista los quiso condenar aún después de muertos. Por fin sus familias podrán saber dónde reposan con exactitud los huesos de sus deudos.
En primer lugar porque, por fin, ha comenzado. Sinceramente teníamos nuestras dudas por los antecedentes de estos dos últimos años. Dudas que quedan despejadas. Nunca hemos querido ningún tipo de protagonismo y por eso nos satisface que, por sea quien sea, se lleven a cabo los trabajos. Estaremos allí apoyándolo y colaborando en lo que podamos y se nos pida. Siempre hemos actuado así, sin ningún tipo de sectarismo ni ninguneo. Seguimos pensando que la acción colectiva es cosa de todos y que instituciones y sociedad civil pueden ir juntas. Eso sí, siempre que se basen en la verdad, se huya del sectarismo y se sea franco.
En segundo lugar porque los trabajos los lleva a cabo el equipo técnico propuesto en su momento en la memoria de trabajo que acompañó a la solicitud presentada y, hasta el momento, no respondida. Un equipo de la máxima garantía profesional y compromiso memorialista. Nunca está de más recordar que las exhumaciones de asesinados por el franquismo no son un mero trabajo arqueológico, sino que tiene un fuerte componente de compromiso social y personal.
En tercer lugar, por fin, por un motivo que tiene un punto de egoísta. También por tercera vez antes ocurrió en Zalamea (Huelva) y Paterna (Cádiz) el dinero que este grupo tiene presupuestado para una intervención de estas características no ha sido invertido. Ya una vez comentamos el poder de atracción que tiene, ya que con esta van tres, el anuncio y petición de utilizarlo ha sido el desencadenante de que las más diversas instituciones nos liberaran del compromiso. Que habrá una cuarta es seguro. Pondremos todo nuestro empeño.
¡Viva Bernabé López Calle!
¡Viva Juan Ruiz Huércano!».