OPINIÓN
Antonio Rodríguez Carrión
Presidente del Observatorio de Salud “Especialistas ¡YA!”
En 1983, hace 40 años, la chirigota “Los cegatos con botas” denunciaba el desmadre de la sanidad andaluza y afirmaba que era como “el cuento que nunca se acaba”. La creación de los Centros de Salud hizo nacer la esperanza de un cambio a mejor, pero la incompetencia en la gestión fue abriéndose paso de forma inexorable y condujo la sanidad andaluza camino al precipicio, tal como afirmaba la prensa en 2017: “Atención primaria en Andalucía: entre todos la mataron y ella sola se murió«; “Los recortes en Sanidad de la Junta de Andalucía matan”.
El 23F de 2024, hace tan solo dos días, un ex alcalde, secretario de organización de un partido político, manifestaba que su partido “está trabajando para impulsar la creación de una plataforma ciudadana en defensa de la sanidad pública andaluza”. Curiosamente, el partido en que milita el ex alcalde es el mismo que durante décadas se ha dedicado a privatizar la medicina pública andaluza, a asignar 5 minutos por paciente en la agenda de los médicos de cabecera, a hacer de la eventualidad laboral un dogma, a cerrar quirófanos y plantas enteras de hospitales durante el verano, a amontonar pacientes en pasillos cuando llega el invierno, a esconder listas de espera quirúrgicas, a jactarse de que gracias a su inmejorable gestión la asistencia sanitaria en Andalucía era referente mundial en “células madre” y la “joya de la corona”…
Ante los ataques que reciben, los actuales responsables de la gestión sanitaria en Andalucía se defienden manifestando que han asignado 10 minutos por paciente, han mejorado los salarios de los sanitarios, están disminuyendo la eventualidad laboral mediante frecuentes concursos y han incrementado el presupuesto sanitario más que nunca. Sin embargo, la dura realidad es que las demoras quirúrgicas y en las citas al médico de cabecera son inadmisibles, la privatización heredada se mantiene y el descontento ciudadano con los responsables de la gestión sanitaria es un clamor.
¿Qué está pasando? ¿La situación actual es por incompetencia de los nuevos gestores o porque algunos de los anteriores que se han mantenido en los cargos o carguitos están actuando como “caballos de Troya” poniendo palos en la rueda? Lo cierto y lo fijo es que el popurrí de “Los cegatos con botas” es de total actualidad: la problemática en la sanidad andaluza es como “El cuento que nunca de acaba”.
