La Comisión Gestora de la Peña Sevillista de Ubrique difundió el 23 de octubre de 2018 un comunicado en el que anuncia la reapertura de su sede (Paseo del Prado, 13) el miércoles 31 de octubre a las 19:30 horas. El texto dice así: «Desde la Comisión Gestora que dirige provisionalmente nuestra Entidad, queremos ponernos en contacto con toda nuestra masa social para compartir una serie de consideraciones de interés general. En primer lugar, en el ámbito estrictamente institucional, tras la no presentación de ninguna candidatura a la Presidencia de nuestra Peña, los miembros de esta Comisión Gestora seguimos con el firme compromiso de seguir al frente de la misma hasta que pueda ser subsanada esta situación, para lo que próximamente se realizará una convocatoria de una nueva Asamblea General Extraordinaria que será notificada en tiempo y forma, y que es nuestra intención que no se demore mucho más en el tiempo».
El comunicado continúa: «En el ámbito social, a día de la fecha nuestra Entidad goza de una economía moderadamente saneada y una masa social, que si bien no se va incrementando y regenerando como sería deseable, sí sigue siendo lo suficientemente amplia para poder afirmar que seguimos siendo una Peña viva y saludable.
Pero seguimos teniendo un gran talón de Aquiles que pone en cuestión y muy seriamente el presente y futuro de nuestra Entidad. Y este no es otro que la escasa o “casi nula” implicación de todos nosotros en el devenir diario de la Peña.
Como es bien sabido, el concesionario del Bar ha decidido dejar de prestar sus servicios, desgraciadamente por motivos familiares, por lo que nuevamente nos hemos visto abocados a la búsqueda de un nuevo Concesionario.
Tras el esfuerzo realizado por varios miembros de esta Gestora, con la ayuda inestimable de un socio comprometido con la situación, se ha podido firmar un contrato de varios años con el nuevo concesionario, Paco Peña, cocinero de profesión que según nos cuenta su especialidad es en arroces y pescados y el cual volverá a abrir las puertas de nuestra sede social a partir del próximo 31 de octubre a partir de las 19:30 horas, ofreciendo un pequeño ágape a los asistentes.
Entendemos que para todos los sevillistas ubriqueños, y muy especialmente para nosotros, sus peñistas, es un motivo de orgullo ver lucir nuestro Escudo en una Peña tan emblemática como la nuestra en lo que han sido los últimos 35 años de vida en nuestra localidad, siendo un referente para muchos otros colectivos de cómo ser una Entidad viva y con múltiples actividades (Carnavales, fútbol-sala, excursiones de nuestros menores al RSP, regalo de Reyes para los peques, etc).
Pues bien, para que esto siga siendo así, cosa que damos por descontado es el deseo de todos y cada uno de nosotros, la Peña necesita inexcusablemente la aportación económica que hace el concesionario del Bar, pues por nuestros propios medios sería totalmente inviable soportar los gastos que conlleva.
Lo cual nos lleva a una segunda reflexión, motivo principal de ponernos en contacto con el peñismo. Si todo esto es así, también resulta inexcusable que el concesionario del Bar tenga el suficiente volumen de negocio que le haga rentable su inversión y permanencia al frente del establecimiento. Y ahí es donde TODOS tenemos que hacer un punto de reflexión. No se está pidiendo estar todos nosotros todos los días en la Peña, pero tampoco la situación actual, en la cual la presencia de peñistas en nuestro local es, a excepción de los días de partido, prácticamente testimonial.
Por ello, desde aquí os animamos a que coincidiendo con este nuevo cambio por parte de una persona que apuesta por nosotros, también nosotros seamos capaces de apostar por el futuro de nuestra Peña, y su apuesta se vea reforzada y compensada con una mayor presencia de peñistas y familiares, y entre todos poder recuperar en la medida de lo posible tiempos pasados donde tomar una copa degustando buenos alimentos y hablando de nuestro Sevilla entre sevillistas vuelva a ser un magnífico plan para el fin de semana».
El comunicado continúa: «En el ámbito social, a día de la fecha nuestra Entidad goza de una economía moderadamente saneada y una masa social, que si bien no se va incrementando y regenerando como sería deseable, sí sigue siendo lo suficientemente amplia para poder afirmar que seguimos siendo una Peña viva y saludable.
Pero seguimos teniendo un gran talón de Aquiles que pone en cuestión y muy seriamente el presente y futuro de nuestra Entidad. Y este no es otro que la escasa o “casi nula” implicación de todos nosotros en el devenir diario de la Peña.
Como es bien sabido, el concesionario del Bar ha decidido dejar de prestar sus servicios, desgraciadamente por motivos familiares, por lo que nuevamente nos hemos visto abocados a la búsqueda de un nuevo Concesionario.
Tras el esfuerzo realizado por varios miembros de esta Gestora, con la ayuda inestimable de un socio comprometido con la situación, se ha podido firmar un contrato de varios años con el nuevo concesionario, Paco Peña, cocinero de profesión que según nos cuenta su especialidad es en arroces y pescados y el cual volverá a abrir las puertas de nuestra sede social a partir del próximo 31 de octubre a partir de las 19:30 horas, ofreciendo un pequeño ágape a los asistentes.
Entendemos que para todos los sevillistas ubriqueños, y muy especialmente para nosotros, sus peñistas, es un motivo de orgullo ver lucir nuestro Escudo en una Peña tan emblemática como la nuestra en lo que han sido los últimos 35 años de vida en nuestra localidad, siendo un referente para muchos otros colectivos de cómo ser una Entidad viva y con múltiples actividades (Carnavales, fútbol-sala, excursiones de nuestros menores al RSP, regalo de Reyes para los peques, etc).
Pues bien, para que esto siga siendo así, cosa que damos por descontado es el deseo de todos y cada uno de nosotros, la Peña necesita inexcusablemente la aportación económica que hace el concesionario del Bar, pues por nuestros propios medios sería totalmente inviable soportar los gastos que conlleva.
Lo cual nos lleva a una segunda reflexión, motivo principal de ponernos en contacto con el peñismo. Si todo esto es así, también resulta inexcusable que el concesionario del Bar tenga el suficiente volumen de negocio que le haga rentable su inversión y permanencia al frente del establecimiento. Y ahí es donde TODOS tenemos que hacer un punto de reflexión. No se está pidiendo estar todos nosotros todos los días en la Peña, pero tampoco la situación actual, en la cual la presencia de peñistas en nuestro local es, a excepción de los días de partido, prácticamente testimonial.
Por ello, desde aquí os animamos a que coincidiendo con este nuevo cambio por parte de una persona que apuesta por nosotros, también nosotros seamos capaces de apostar por el futuro de nuestra Peña, y su apuesta se vea reforzada y compensada con una mayor presencia de peñistas y familiares, y entre todos poder recuperar en la medida de lo posible tiempos pasados donde tomar una copa degustando buenos alimentos y hablando de nuestro Sevilla entre sevillistas vuelva a ser un magnífico plan para el fin de semana».